Horrorismo
Sinopsis
En la larga historia de la destrucción, el horror va a condensar el sentido de la violencia contemporánea. «Guerra», «terrorismo», «enemigo» y otras categorías de la tradición política se muestran inadecuadas respecto a la realidad de la actual carnicería de los inermes. El crimen ontológico excede la forma organizad del simple asesinato. La práctica de la deshumanización excede la estrategia homicida. Revisando los iconos de Medusa y la infanticida Medea, pasando por la aberración de Auschwitz, y confrontándose con Abu Ghraib, Beslan, el fenómeno de las mujeres-bomba y otras escenas de la actual carnicería, el libro invita a un radical cambio de perspectiva. Propone que se dirija la reflexión a la condición de vulnerabilidad absoluta de quien sufre la ofensa, no a la abominación de quien la ejerce. Abandonando el punto de vista del guerrero y adoptando el de la víctima inerme, Cavarero puede así construir una ontología de la vulnerabilidad, condición humana que nos expone a la dependencia del otro: tanto a su cuidado como a su ultraje. En el caso actual, el horror es extremo pues eliminando a las víctimas, incluso su identidad singular, las masacra «por casualidad» o «por error», de modo que a su cotidianidad se suma nuestra indiferencia.